Atentado contra Luis Ángel Peñaflor Camey destapa red de corrupción en la Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas

Ciudad Victoria, Tamaulipas, 28 de mayo de 2025.— El atentado contra Luis Ángel Peñaflor Camey, coordinador de la Guardia Estatal en Nuevo Laredo, ocurrido el pasado 19 de mayo en un restaurante de esta capital, ha desatado una serie de denuncias internas que revelan una red de corrupción dentro de la Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas.

Elementos policiacos, que solicitaron el anonimato, denunciaron que Peñaflor Camey ha recibido importantes sumas de dinero de procedencia ilícita, con el respaldo del titular de SSPT, el general retirado Sergio Hernando Chávez García. “El coordinador se comporta como si fuera intocable. Recibe dinero de personas sospechosas y todos lo sabemos, pero nadie dice nada por miedo. Está protegido desde arriba”, afirmó un agente de la Guardia Estatal.

De acuerdo con testimonios de oficiales, Peñaflor Camey está vinculado a operaciones de cobro de cuotas a la delincuencia organizada en Reynosa y Ciudad Victoria, recibiendo depósitos de fuertes sumas de dinero de procedencia ilícita en su cuenta de nómina en Banorte (0870633025) y su CLABE interbancaria (072 81000870633025 2).

Se han documentado al menos dos depósitos de dinero de procedencia ilícita a la cuenta de nómina de Peñaflor Camey, el primero el 21 de febrero de 2025 por 30 mil pesos y el segundo el 21 de marzo de 2025 por 100 mil pesos, este último realizado en un banco en Reynosa, Tamaulipas. El dinero fue retirado por el jefe policiaco, aunque aseguro que lo “había reportado”.

De acuerdo a los artículos 9 fracción IV, 14 fracción IV y 19 fracción XIX de Reglamento Interior de la SSPT, Peñaflor Camey tenía la obligación de realizar un reporte interno o un parte oficial, denunciando estos depósitos, entregar el dinero– lo que no hizo, ya que el dinero lo retiro de su cuenta y lo gasto- y a su vez la Secretaria de Seguridad Publica del Estado de Tamaulipas a través de la Dirección de Operaciones debería denunciar los hechos a la autoridad competente, para dar inicio a una carpeta de investigación.

Además el artículo 6, fracción XIX del mismo Reglamento establece que el Secretario debe informar al Gobernador sobre el ejercicio de sus funciones, lo que incluye coordinar el turno de denuncias a la autoridad competente. Esto implica que, al tener conocimiento de un delito, los elementos policiacos están obligados a reportarlo a sus superiores, y la Secretaría tiene la obligación de interponer la denuncia correspondiente.

Una conversación de WhatsApp filtrada, con fechas entre el 23 y 24 de febrero de 2025, muestra a Peñaflor Camey reconociendo haber recibido un depósito de 30 mil pesos en su cuenta bancaria el día 21 del mismo mes. “Tuve que reportar que me había caído un depósito a mi cuenta, desconociendo su procedencia, para evitar problemas en las evaluaciones futuras”, se lee en uno de los mensajes. Sin embargo, el dinero no fue entregado a ninguna autoridad ni se inició algún procedimiento interno de investigación.

Según los denunciantes, este tipo de transferencias son frecuentes. En la misma conversación, Peñaflor Camey admite haber recibido dinero en efectivo y reprocha a su interlocutor: “¿Qué pasó, canijo? Te dije que luego te veía. Igual que la pasada, el saludo debe ser de mano”.

El interlocutor responde: “¿Qué te costaba tomarlo como la primera vez? Ni pío dijiste”, a lo que Peñaflor Camey contesta: “Sí, pero es que no vi claro el saludo para allá abajo, y en eso habíamos quedado”. Esta frase hace alusión a dinero destinado para el secretario de Seguridad Pública del estado, Sergio Hernando Chávez García.

En otro fragmento del chat, el remitente escribe: “Ese saludo aquí lo tengo para dártelo de mano. Ayer quedaste muy formal de mandar mensaje para echar una platicadita y nomás nada”, y Peñaflor Camey responde: “Sí, oiga, pero traigo demasiado trabajo en la oficina. Déjeme termino o le avanzo, y ya lo hacemos”.
En otra parte de la conversación, la misma persona le comenta: “Y te iba a mandar lo otro que me pediste para llevar a Victoria, pero no quise ser tan culero”, a lo que Peñaflor Camey responde: “¡Nooo! Eso no, ahí sí me das bien en la madre”, agregando: “Pero la verdad, así no son las cosas. Pero bueno, ahí me reporto más tarde para platicar en algún lugar”.

Otro punto que ha generado indignación entre los elementos de la corporación es el uso de equipo oficial durante su tiempo libre. Testigos del atentado en el restaurante “La Cocktelera” reportaron que Peñaflor Camey portaba uniforme táctico, llevaba consigo un fusil tipo AK47 y se transportaba en una patrulla blindada, a pesar de estar oficialmente de vacaciones. Esta conducta constituye una violación al Artículo 46 de la Ley de Seguridad Pública de Tamaulipas.

Las denuncias contra Peñaflor no son nuevas. En abril de este año fue acusado de encubrir a un ex policía prófugo, implicado en un doble homicidio ocurrido en 2018. Sin embargo, la protección que recibe del secretario de Seguridad Publica, el general retirado Sergio Hernando Chávez ha bloqueado cualquier intento de investigación interna.

Ante esta situación, la sociedad civil y diversas organizaciones de derechos humanos exigen al gobernador Américo Villarreal Anaya que ordene una investigación independiente que permita sanear la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Tamaulipas.

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